Panqueques con dulce de leche: el postre clásico, fácil y económico que no pasa de moda

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Los panqueques con dulce de leche son un verdadero ícono de la cocina argentina. A pesar de su simplicidad, se han convertido en una estrella de muchas cartas gastronómicas, compitiendo con postres más elaborados como el tiramisú, el flan casero o los waffles. Sin embargo, su encanto radica en que siguen siendo una de las recetas más fáciles, rápidas y económicas de preparar en casa.

Con una textura suave y cremosa, y el infaltable sabor del dulce de leche como protagonista, estos panqueques son perfectos para una merienda reconfortante, especialmente en los días fríos.

Receta exprés: solo 4 ingredientes y 15 minutos

Ingredientes básicos:

1 taza de leche

1 huevo

1 taza de harina

(Opcionales: una pizca de sal, azúcar y unas gotas de esencia de vainilla)

Para el relleno:

Dulce de leche (cantidad a gusto)

Crema batida, frutas (banana o frutilla) o frutos secos (opcionales)

Paso a paso para hacer panqueques con dulce de leche caseros

En un bowl, batí el huevo y agregá la leche. Incorporá la harina poco a poco, mezclando bien para evitar grumos. Podés sumar sal, azúcar o esencia de vainilla si querés darle un toque distinto.

Calentá una sartén antiadherente a fuego medio y volcá un cucharón de la mezcla.

Cociná cada panqueque por 2 a 3 minutos hasta que aparezcan burbujas. Dales la vuelta y cociná otro minuto hasta que estén dorados.

Rellenalos con dulce de leche, crema batida o frutas, y enrollalos o doblalos al gusto.

Trucos para panqueques perfectos

Consistencia ideal: Si la mezcla está muy espesa, agregá un poco más de leche; si está muy líquida, sumá harina.

Sartén bien caliente: Es clave para que no se peguen y se cocinen parejo.

Variedades creativas: Podés sumar a la mezcla frutas picadas, chispas de chocolate o nueces para innovar sin complicarte.

Un clásico que nunca falla

Por su sabor, su bajo costo y su practicidad, los panqueques con dulce de leche siguen siendo un favorito en las mesas argentinas. Perfectos para compartir en familia o como un mimo dulce en cualquier momento del día, esta receta es un verdadero comodín de la cocina casera.

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