Historiador, docente de la Universidad de Buenos Aires e investigador del Conicet, Omar Acha es autor de libros como Marxismo e historia: deconstrucción del materialismo histórico (2023) y Peronismo de imprenta: comentarios sobre literatura y política (2024). En la emisión de este sábado 28 de junio, visitó al staff de El Círculo Rojo (el programa radial de La Izquierda Diario que se emite los sábados de 12 a 14 hs por Radio Con Vos, FM 89.9) y dejó varias definiciones muy interesantes para pensar sobre Milei y las nuevas derechas, el peronismo y perspectivas para la izquierda.
“Diría que lo que el discurso que Milei hace en torno a la historia es crear una edad dorada, que para él es entre 1870 y 1916, liberal, de libre mercado, sin intervención estatal, y que ese camino habría sido traicionado por el estatismo y el distribucionismo”.
“Procura volver a esa misma lógica en la que el mercado organiza todo, pero no corresponde a lo que conocemos: en 1880, Roca promovió la educación pública y separó a la Iglesia del Estado, hubo incentivo de inversiones extranjeras para generar las condiciones de desarrollo”.
“En la discusión política, la oposición verdad/falsedad no es eficaz. Como en la izquierda somos hijos de la Ilustración, de la razón y el conocimiento, no podemos lanzarnos a discursos o mitos sino que confrontamos con el conocimiento”.
«Es preciso construir propuestas historiográficas que sean atractivas, que interpelen, que generen una orientación. Eso involucra la generación de sentidos, nuevas opciones culturales que conquisten. A los relatos libertarios hay que ponerles mejores relatos”.
“Creo que la idea de volver al pasado no es verosímil, porque la realidad mundial se ha transformado, la lógica capitalista no es la misma. La Argentina de esa época tenía 4 millones de habitantes, otra estructura social y económica, periodo soñado inverosímil”.
“Las perspectivas de la izquierda, hacia una realidad completamente diferente, son mucho más creíbles que plantear que se pueda eliminar el Banco Central. En ningún país relevante se puede eliminar, por razones internas de la lógica económica y demás”.
“Surgen a nivel global en una sociedad capitalista que no puede reconstituir una tasa de ganancia acorde a lo que fue en su período glorioso del ’50 al ’80, y sin embargo hay un desarrollo de las fuerzas productivas, esto deriva en una dinámica desigualitaria”.
“Todas las condiciones que hacían posible una postura política más flexible con cierta redistribución, se han modificado. Por ejemplo, todo aquello que sostenía el peronismo, de una clase obrera industrial, con pleno empleo y grandes sindicatos se ha desarticulado”.
“No se puede regresar a esa Argentina de mediados de siglo XX cuya estructura económica y social está desfigurada. Ante la crisis del centro que está siendo devorada por la ultraderecha, la única opción viable es construir una opción de izquierda radical”.