José Vicente Matías, más conocido como «Corumbá», es un asesino serial brasileño que violó, mató y desmembró a seis niñas y mujeres entre 1999 y 2005.
Nacido el 24 de septiembre de 1966, este sujeto, que se desempeñaba como artesano, también practicaba el canibalismo con los restos de sus víctimas, ya que tomaba su sangre y comía trozos de cerebro de ellas.
A la hora de explicar los motivos que lo llevaron a matar a esas niñas y mujeres, «Corumbá no fue claro, ya que dio testimonios contradictorios en varias ocasiones.
A veces decía haber sufrido influencias del diablo, quien le comentó al oído que su misión era matar a siete mujeres, y en otras alegó que era víctima de xenofobia y de bromas dirigidas a él por su impotencia sexual.
Matías, antes de cometer esos homicidios, tenía un antecedente penal por violación y agresión violenta, al tiempo que el lugar elegido para cometer los homicidios eran casi siempre lugares
cercanos a la playa.
En septiembre de 1999, en el municipio de Três Marias, este criminal cometió su primer crimen al matar a Natália Canhas Carneiro, de 15 años, originaria de Minas Gerais.
En junio de 2000 fue asesinada en el municipio de Lençóis Simone Lima Pinho, de 26 años, que era artesana de Bahía, tras recibir golpes violentos y ser apedreada hasta la muerte.
En enero de 2004, en Goiania, mató a Lidiane Vieira de Melo, una chica de 16 años que pasó un día y medio atada mientras «Corumbá» bebía su sangre. Tras su muerte, su cuerpo fue desmembrado.
Katryn Rakitov, una mujer ruso-israelí de 29 años, fue asesinada en Pirenópolis, Goiás, en abril de 2004, mientras que Maryanne Kern, una turista alemana de 49 años, fue encontrada en una fosa poco profunda en el municipio de Barreirinhas, en Maranhão, el 16 de marzo de 2005.
Por su parte, Núria Fernández Collada, una turista española de 27 años, murió de golpes en la cabeza y le ingirieron partes del cerebro y sangre después de que Matías realizara un ritual de
danza. Esta mujer fue asesinada en la playa de Itatinga, en Alcântara, Maranhão, el 26 de marzo de 2005.
El 29 de marzo, cuatro días después del último homicidio, Matías fue detenido por la Policía de Brasil en una pensión y confesó haber matado a la alemana Kern y a la española Frnández Collada.
«Corumbá», finalmente, fue condenado a 23 años de prisión el 2 de junio de 2008.